¿Qué válvulas se adaptan mejor a tu proyecto? Descubre las diferencias clave con Koslan
A continuación, te explicamos en qué casos conviene cada tipo, sus ventajas y limitaciones, para que tomes la decisión más inteligente.
Válvulas metálicas: Robustez y alta resistencia
Las válvulas fabricadas en acero, hierro fundido, bronce o acero inoxidable son la elección tradicional en industrias donde se requieren materiales capaces de soportar altas presiones, temperaturas elevadas o entornos mecánicamente exigentes.
Sus principales ventajas:
- Excelente rendimiento en sistemas de alta presión (tuberías hidráulicas, vapor, gas).
- Resistencia a altas temperaturas (ideales para procesos industriales con altas temperaturas).
- Mayor durabilidad en aplicaciones con vibraciones o impactos (plantas manufactureras, minería pesada).
¿Cuándo son la mejor opción?
- Industrias petroleras y energéticas (válvulas de acero inoxidable o aleaciones especiales).
- Sistemas de agua potable y calefacción (válvulas de bronce o latón por su resistencia a la oxidación).
- Procesos donde la integridad estructural es crítica.
Limitaciones a considerar:
- Son propensas a la corrosión en ambientes químicamente agresivos o con alta humedad.
- Mayor costo general.
Válvulas plásticas: Anti-corrosión y especializadas
Las válvulas de PVC y otros materiales plásticos como CPVC o polipropileno están revolucionando aplicaciones donde los metales fallan. Su principal fortaleza es la resistencia química, lo que las hace invencibles en entornos corrosivos.
¿Por qué elegirlas?
- Inmunes a la corrosión, ideales para ácidos, bases, cloro y salmuera.
- Hasta un 80% más livianas que las metálicas, facilitando su instalación.
- Larga vida útil en ambientes agresivos, con una durabilidad 3-4 veces superior al metal en ciertos casos.
- Menor costo total.
Aplicaciones ideales:
- Plantas de tratamiento de aguas y químicos (resistentes a cloro y ácidos).
- Industria alimentaria y farmacéutica (evitan contaminación por óxido).
- Minería y sistemas de riego (excelente resistencia a la abrasión y sales).
- Instalaciones marinas (no se degradan con agua salada).
Aspectos a tener en cuenta:
- No son aptas para altas temperaturas (generalmente soportan hasta 60-80°C).
- Menor resistencia a impactos físicos comparado con el metal.
Metálicas vs. plásticas: ¿Cuál elegir?
La elección entre válvulas metálicas y plásticas depende esencialmente de tus condiciones operativas: si trabajas con altas presiones, temperaturas extremas o cargas mecánicas intensas, las metálicas (como acero inoxidable o bronce) serán tu mejor opción; en cambio, si manejas fluidos corrosivos, buscas reducir peso o minimizar mantenimiento, las plásticas (como PVC LD) ofrecen ventajas decisivas en resistencia química y costo-beneficio a largo plazo.
Evaluar factores como corrosión, peso, temperatura y costo operacional te ayudará a tomar la mejor decisión.
Nuestro Project Manager, Ciro Ávila, preparó una cápsula donde te explica paso a paso cómo seleccionar la válvula ideal para cada sistema, considerando factores como tipo de fluido, presión, temperatura y condiciones del entorno. Una guía práctica que te ayudará a tomar decisiones más seguras y eficientes.
En Koslan puedes encontrar una diversa variedad de válvulas, tanto metálicas como plásticas, para que puedas elegir la que mejor se adapte a tu proyecto.

